Un recuerdo y el mar

[escrito debido a la nostalgia y melancolía que puede provocar una tarde de diciembre, con unos tragos de más y mucha gente a tu costado]

...y hoy pasé por donde caminamos una tarde,
y simplemente no te encontré,
miré al mar...
las olas eran las mismas,
miré al cielo...
despejado,
claro,
como una inmensa acuarela a lo lejos,
como ese día,
miré a mi alrededor...
el mismo perro ladrando
volteé a ver si estabas...
recordé que te fuiste,
recordé que te extraño...
y lo único que hice fue prender un cigarro...
mirar a lo lejos
e irme.

entré al mar,
el agua algo sucia mojaba mis cabellos con la misma fuerza de siempre...
me persigné tres veces como de costumbre,
demostrando respeto al mar y a su descomunal poder...
me adentré en las aguas,
el agua helada fue adaptando mi temperatura corporal y ya no me parecía tan fría...
las olas parecían querer llevarme contigo,
pareciese que supieran que te quiero ver,
que te necesito más que nunca
pero mi instinto de supervivencia me hacía nadar de vuelta,
alejándome de ti,
aunque más lejos no puedo estar...

no me atreví a entrar a la isla,
no me atreví a recordar esa tarde,
no sabía como iría a reaccionar...
me alejé y la seguí mirando a lo lejos
recordando nuestra promesa

al irme de punta hermosa,
la nostalgia se apoderó de mi,
recordando aquel verano,
el último que pasé contigo
y ahora para mi,
punta hermosa por siempre será...
tú

Dedicado a Milena